4 años de exilio (¿in?)voluntario
Pero salir de su país violentamente, sin quererlo, sin haberlo pensado, sin más objeto que salvarse de las garras de la tiranía [...] es un verdadero suplicio, un tormento que nadie puede sentir, sin haberlo por sí mismo experimentado. ¿Y dónde vamos cuando emigramos? No lo sabemos. A golpear la puerta al extranjero; a pedir hospitalidad, buscar una patria en corazones que no pueden comprender la situación del nuestro, ni tampoco interesarse por un infortunio que desconocen y que miran tan remoto para ellos como la muerte. La emigración es la muerte: morimos por nuestros allegados, morimos por la Patria, puesto que nada podemos hacer por ellos.
Esteban Echeverría, Afectos íntimos, mediados del siglo XIX.
Etiquetas: autobiográficas, citas
3 Comments:
cuánto lo siento muchachito, cuánto. sobretodo por la incomprensión del arrancado.
No pongas ningún clavo en la pared,
arroja sobre una silla tu chaqueta.
¿Vale la pena preocuparse por cuatro días?
Mañana volverás.
¿Mañana volverás?
Vale la pena preocuparse por cuatro días.
Bertold Brecht, "Meditaciones sobre la duración del exilio".
Recomiendo mucho el libro "Tierra que anda" de Jorge Boccanera. Son textos y testimonios de escritores y periodistas exiliados. Sorprendente. Doloroso. También los exilios se viven desde adentro.
alicia: Non ti preocupare, alicia. Hay gente que comprende.
laumagog y flor: Muy buenas las citas. Me anoto la recomendación, flor, gracias.
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